miércoles, 13 de abril de 2011

Empiezo por mí

Como ya anticipé, he creado este blog con la intención de tener "un rincón para pensar" donde poder plasmar mis pensamientos y preocupaciones sobre el sistema social, la educación, las relaciones personales, la vida... todo aquello que me hace pensar, despierta alguna inquietud en mí o me preocupa en mayor o menor medida.
Y la primera entrada no podía ser otra sino plasmar mi filosofía de vida, la mentalidad desde la que voy a percibir todos los problemas, pensamientos y preocupaciones que aquí trate: "empiezo por mí, empieza por tí".
No voy a descubrir la pólvora con esto que escribo, pero es importante que sepáis a través de que cristal miro el mundo, para así comprender mejor cada entrada de este blog.

Toda la vida nos la pasamos buscando excusas y tirando balones fuera. Todo lo que nos pasa es culpa de los demás y en pocas ocasiones reconocemos que el cambio puede estar en nuestras manos. Es una actitud totalmente adolescente: "el mundo contra mí". Gastamos más energía en protestar y buscar culpables, que en ponernos en acción. No digo que una persona sola pueda cambiar el mundo, pero para empezar a cambiarlo hay que empezar por uno mismo. No podemos exigir a los demás lo que no somos capaz de hacer nosotros mismos. Si quieres que algo cambie, empieza por cambiarlo tú (en la medida que esté en tus manos).
"El movimiento se demuestra andando", ya está bien de tanta queja y de tanto conformismo: "levántate y anda". Si algo no te gusta, trata de cambiarlo. Cada vez que te quejas o te resignas, estás fomentando que nunca llegue el cambio. No esperes a que los demás cambien: empieza por ti. Yo cada día intento empezar por mí.
En resumen (y plagiando a J.L. Sampedro): REACCIONA.

3 comentarios:

  1. Y qué mejor que comenzar hoy mismo con este ánimo, sin más pretensiones sobre el mundo que las que están en nuestras manos, en nuestros propios pasos... Hoy empiezo por mi! Gracias, Vero.

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  2. Ahí está, los cambios empiezan en las pequeñas cosas y grandes cosas, como nuestros corazoncitos.

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  3. Cambia tu corazoncito y cambiarás el mundo! =)
    El poder de las gotas de agua cuando se juntan: podemos formar un océano, pero para provocar tsunamis tenemos que empezar por movernos de uno en uno, en la misma dirección, y cuando se mueve alguien que tienes al lado, te empuja un poquito a moverte o por lo menos a pensar porque no te mueves y si deberías hacerlo. Piensa, reacciona y muévete. Empieza por tí, exígete lo que le exiges a los demás...

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